Ya en 1955 mientras se movía entre las juntas de cofradía en los bares y las clases en la universidad de Oxford, J.R.R. Tolkien tenía que escuchar a menudo la principal crítica negativa que se hacía a sus libros publicados: La literatura de fantasía es escapista y no ayuda en nada. Esa voz que el escritor no pudo acallar en su momento hoy la ciencia puede enterrarla para siempre.
Los libros de fantasía lejos de caer en desuso, fueron poco a poco tomando una fuerza inusitada, que ya durante su vida ni siquiera el mismo profesor Tolkien había imaginado. Hoy en día la situación es clara, con una oferta inmensa y muchísimo material adaptado a partir de ella, la literatura de fantasía tiene su lugar entre los primeros para la generación de los millennials.
Nuevos estudios
Hace algunas semanas, la revista Scientific American vino a confirmar algo que muchos de los fanáticos de Harry Potter ya estaban percibiendo. La literatura de fantasía no incide de mala manera en los niños y por el contrario, mejora sus procesos de aprendizaje.
En un estudio hecho por Deena Weisberg, de la Universidad de Pensilvania, se puso a prueba en dos grupos de prescolares el aprendizaje de algunas palabras y sus conceptos, en uno de los grupos se les enseñaba mientras se contaban historias realistas sobre agricultura y cocina, mientras que al otro grupo lo mismo se le enseñaba pero mediante cuentos de fantasía. El resultado fue que el grupo de fantasía demostró una clara ventaja para el aprendizaje de los conceptos por sobre el grupo realista.
«el grupo de fantasía demostró una clara ventaja para el aprendizaje»
Según las conclusiones de la autora del estudio y también avalado por otros estudios hechos con anterioridad, el ocupar historias que apelen a nuestro lado fantástico genera automáticamente una mayor capacidad de concentración y despierta nuestro sentido innato de la curiosidad. Lo que lejos de ser escapista a nuestro mundo, nos lleva automáticamente a cuestionar y aprender sobre nuestra propia realidad.
Cómo aplicarlo en casa
Ahora ya sabes, si tienes ganas de ver algo entretenido junto a tu hijo, hermano chico, sobrino, etcétera y tienes ganas de que aprendan cosas nuevas, pon una película de fantasía y cada 20 minutos pon pause y discute lo que ha pasado con el niño mientras aprovechas de enseñar algunas cosas, por que sí… Los orcos son muy malos oh sí, porque les gusta destruir el planeta y cortan los árboles para sacarles provecho ¿qué mal cierto?, en cambio los elfos ¿cómo son? sí, cuidan la naturaleza y quieren mucho a los animales y les gusta pintar, sí con colores lindos…