Los opuestos no se atraen

Durante décadas la cinematografía y literatura nos ha sugerido que los opuestos se atraen. La lógica sería que, dadas las grandes diferencias que hay, las partes se terminan complementando. Abundan las historias de las «niñas buenas» atraídas por el «chico malo», la mujer alocada e impulsiva sacando de su zona de confort al hombre serio […]